Sandro Ramírez no olvida de dónde salió, y por eso está deseando marcar el domingo al Real Madrid. El ariete del Málaga está en un momento dulce, y buena parte de las esperanzas culés pasan por ahí: si los blancos no puntúan en La Rosaleda y ellos ganan al Eibar, se proclamarán campeones. “Ojalá pueda marcar un gol que le dé la Liga al Barça”, dijo el canterano blaugrana en declaraciones a ‘Gol’.

El actual máximo artillero del equipo entrenado por Míchel se siente culé desde siempre, aunque sus primeros pasos en el fútbol los diera en la UD Las Palmas. Por eso, rechazó al Real Madrid. “Fue una emoción muy grande, sobre todo para mis padres, cuando vino a por mí el Barcelona a buscarme tras siete años en la UD Las Palmas. Tuve la oportunidad de ir al Madrid pero el Barça me gustaba más, porque siempre fui del Barça y mi padre, también”, recordaba.
De sus últimos días en el Barcelona no guarda buen recuerdo: la competencia en el ataque culé le cortó el paso al primer equipo. “El último año fue el más jodido. Pero sabes que tienes a los mejores por delante, así que no me arrepiento de nada”, dice. Es aconfianza sí la tuvo de mano de Míchel. “Desde el primer día me dijo que yo era un jugador fundamental para él y eso lo que necesita un futbolista. La confianza es fundamental en el fútbol. Soy ambicioso y sé que puedo dar mucho más. Estamos en buen momento y mi deseo es acabar de la mejor manera posible”, avisó.
Tampoco se arrepiente de haberle marcado al Barça, ya que ese tanto le sirvió para reivindicarse. “No celebré el gol como debería ante el mejor equipo del mundo por mi pasado, pero me debo al Málaga y lo daré todo hasta el último día”, promete. Por eso quiere ser protagonista en esta jornada: “Ojalá sea un día soñado. Se lo debo todo al Barça. Si marco y le doy la Liga…”