Marcos Llorente será una baja importante del Alavés este domingo en el Santiago Bernabéu, pero no será por lesión ni por decisión técnica. El canterano madridista no podrá estar ante su equipo porque, por contrato, no va a jugar.

“Es una cosa que cuando salí cedido ya sabía que iba a pasar. Me fastidia mucho, pero bueno, a pensarlo lo menos posible”, ha dicho a los micrófonos de ‘El Golazo de Gol’. No es la primera vez que esta temporada sale a colación el asunto de la cláusula del miedo en los contratos.
Munir El Haddadi, cedido en el Valencia por el Barcelona, marcó en el Camp Nou al conjunto blaugrana, aunque no lo celebró. El tanto no sirvió para evitar la derrota de su equipo, pero levantó de nuevo el tema. Más grave fue el caso del venezolano Machís. El futbolista, propiedad del Granada cedido en el Leganés, le marcó al club que tiene sus derechos, lo que supuso la derrota del equipo nazarí y la victoria del madrileño. Esa derrota dolió especialmente a los de Lucas Alcaraz, ya que no sólo les había marcado uno de sus propios futbolistas, sino que además les colocó en una posición muy complicada en la clasificación.