No se lo den por favor y además metanse con él. Hablen de hacienda, del tráfico de drogas, de que es un dictador y manda más que Rossel, que Laporta y que Cruyff juntos. Digan que ya no es el mejor, que Cristiano le supera, que meter 70 goles en un año es mejor que 50 en seis meses y además cojo. Resuciten a Chitalu, hablen de Maradona y entierrenlo. Ayúdennos porque nosotros no podíamos decirle nada porque ya ha ganado Cuatro Balones de Oro, ya ha marcado en todas las finales en las que ganó y tiene Champions, Mundiales de Club, Botas de oro y Pichichis.


Por favor entreguen el balón de oro a Cristiano que Messi está aburrido de ganar y necesita enfadarse un poco. Ustedes lo han resucitado y en la mirada del partido del Getafe no se leían 60 o 70 goles para 2014, ni una Champions, no, su mirada era la de que aquí estoy yo y soy el mejor y lo van a ver y se van arrepentir otra vez y voy a meter 100 goles y voy a ganar el mundial y los voy a dejar en ridículo y voy a jugar tan bien que cuando llegue Diciembre del 2014 no habrá prórrogas que valgan ni periódicos que se atrevan a tener la vergüenza de decir que han visto a algún jugador mejor en su vida, ni en esta vida ni en la otra ni en las que vengan.


Entreguen el balón de oro a Cristiano y hagannos el favor de que Messi se enfade un poquito y salga los próximos 50 partidos con la mirada de ayer.


Sigan hablando de todo menos de su fútbol, que ya nosotros disfrutaremos sus goles, sus asistencias, sus regates, su seguridad.


Y algún día en 20 años verán los vídeos de Messi y se hablará de él y ustedes se preguntarán cómo escribieron lo que escribieron o pensaron lo que pensaron y sonreirán sabiendo que en realidad siempre fueron conscientes de la realidad, que Messi es el mejor jugador de la historia, el jugador total.