orujillo
20/10/2017, 07h38
El vicepresidente económico de la Generalitat (https://www.elconfidencial.com/tags/organismos/generalitat-de-cataluna-2949/) y líder de ERC, Oriol Junqueras, ha convocado hoy una reunión secreta en la Conselleria de Economía para intentar frenar la sangría de empresas que están desplazando su sede social y fiscal fuera Cataluña a causa del proceso de independencia (https://www.elconfidencial.com/tags/temas/independencia-de-cataluna-5506/), según explican fuentes cercanas al departamento y conocedoras de los entresijos del encuentro.
La reunión no es baladí, ya que se produce dentro de un clima de gran nerviosismo dentro de la Generalitat, no solo por la mala imagen que proyecta esta fuga de empresas sino por la paralización de inversiones y el riesgo real de destrucción de empleo.El encuentro está convocado hoy a las 13:00, y en él participarán otros altos cargos del departamento y representantes de empresas que todavía mantienen importantes centros de actividad industrial y económica en Cataluña o que aún cuentan con su sede social y fiscal en territorio catalán.Entre los asistentes invitados por la 'conselleria' figuran responsables de empresas como Hewlett-Packard, el fabricante de trenes Alstom, el bufete de abogados Baker & McKenzie, Microsoft, la consultora GTS o el gigante de la logística Segro, entre otras.
El objetivo es tranquilizar a los responsables de las compañías sobre la incertidumbre que azota el entorno económico con motivo del 'procés'. Junqueras quiere dar garantías personales a los empresarios de que el entorno económico seguirá siendo estable, pese a las incertidumbre políticas y las tensiones con Madrid, que amenaza con la aplicación del artículo 155 de la Constitución.El secretismo con que se celebra la cumbre lo ha impuesto el propio Junqueras, quien ha dado la consigna de que se priorice evitar cualquier tipo de filtraciones. El 'vicepresident' también desea escuchar a las multinacionales y sus razones, ya que entiende que estas compañía tienen una posición mucho más racional que las empresas españolas, y que no están actuando de manera preventiva a la hora de mover sus sedes.
A partir del 1 de octubre, fecha del referéndum, se empezó a detectar un pánico empresarial que comenzó por los bancos —Sabadell y CaixaBank—, pero se extendió como un reguero de pólvora. Según el último dato del Colegio de Registradores, hasta la tarde de este jueves 917 empresas han movido su sede fuera de Cataluña, muchas de ellas trasladando también la sede fiscal. El ritmo está alcanzando más de un centenar al día.Oficialmente, la respuesta de Junqueras siempre ha sido minimizar el fenómeno. Primero lo relativizó diciendo que tampoco pasaba nada porque se iban a los países catalanes (https://www.elconfidencial.com/espana/cataluna/2017-10-06/independencia-cataluna-sabadell-junqueras-paises-catalanes_1456539/), días después puso el énfasis en que no marchaba el personal ni se cerraban plantas productivas. También destacó el bajo coste fiscal para la Generalitat, las cifras de inversión extranjera directa, y se acusó a Madrid de estar detrás de una campaña para que saliesen de Cataluña. Pero de puertas adentro, la situación se percibe como de extrema gravedad.
Responsabilidad políticaPor ahora, Junqueras ha podido esquivar las responsabilidades políticas. El Parlament está secuestrado por la mayoría soberanista y hace mes y medio que no hay control del Govern. Así que Junqueras ni siquiera ha tenido que comparecer en la comisión de Economía, donde PP y PSC han solicitado que acuda a dar explicaciones sobre la marcha de sedes sociales y fiscales de empresas. Como la comisión no se reúne, Junqueras no ha dado señales de vida. El PSC ha pedido en varias ocasiones su dimisión (https://www.elconfidencial.com/empresas/2017-10-07/oposicion-pide-dimision-junqueras-perdida-sedes_1457141/) por la fuga de empresas de Cataluña.
La oposición ha pedido la dimisión de Junqueras por su imprevisión en la fuga de sedes de empresas de Cataluña, pero él ha esquivado ir al Parlament
Desde la 'conselleria' se quiere poner el énfasis en las empresas industriales que no han abandonado la comunidad, caso de Seat, Lidl, Nissan, Endesa, Nestlé, Basf, Cargill, Schneider Electric, Novartis, Danone, H&M, Sanofi Aventis, Havas Media Group, Sca Hygiene Products, Unilever, Celsa Group, Lear y Boehringer Ingelheim, teniendo en cuenta los grupos con mayor facturación.
Peso de la industriaEn estos casos, se trata de industrias con activos pesados instalados en Cataluña y de multinacionales con mucha tradición en el mercado catalán. Sin embargo, no está previsto que las compañías antes citadas participen en la reunión.Desde la Generalitat están intentando minimizar el 'efecto sede', que a la larga implica perder la condición de centro de decisión, el desplazamiento de servicios corporativos y el traslado de directivos, además de otros efectos, como la pérdida de ingresos fiscales como el IAE. Ayuntamientos como Sant Cugat (Catalana Occidente) o Sabadell (Banco Sabadell) sufrirán un impacto negativo en las cuentas municipales del año que viene.
Uno de los factores más desestabilizadores para las empresas es la ley de transitoriedad (https://www.elconfidencial.com/espana/cataluna/2017-10-15/ley-transitoriedad-cambiar-constitucion-decreto_1460883/), que podría entrar en vigor una vez se declare la independencia, algo que ahora Junts pel Sí y la CUP quieren hacer la próxima semana. Este texto jurídico permite cambiar por decreto todo el marco legal. Y, precisamente, seguridad jurídica es lo que más quieren las empresas.
La reunión no es baladí, ya que se produce dentro de un clima de gran nerviosismo dentro de la Generalitat, no solo por la mala imagen que proyecta esta fuga de empresas sino por la paralización de inversiones y el riesgo real de destrucción de empleo.El encuentro está convocado hoy a las 13:00, y en él participarán otros altos cargos del departamento y representantes de empresas que todavía mantienen importantes centros de actividad industrial y económica en Cataluña o que aún cuentan con su sede social y fiscal en territorio catalán.Entre los asistentes invitados por la 'conselleria' figuran responsables de empresas como Hewlett-Packard, el fabricante de trenes Alstom, el bufete de abogados Baker & McKenzie, Microsoft, la consultora GTS o el gigante de la logística Segro, entre otras.
El objetivo es tranquilizar a los responsables de las compañías sobre la incertidumbre que azota el entorno económico con motivo del 'procés'. Junqueras quiere dar garantías personales a los empresarios de que el entorno económico seguirá siendo estable, pese a las incertidumbre políticas y las tensiones con Madrid, que amenaza con la aplicación del artículo 155 de la Constitución.El secretismo con que se celebra la cumbre lo ha impuesto el propio Junqueras, quien ha dado la consigna de que se priorice evitar cualquier tipo de filtraciones. El 'vicepresident' también desea escuchar a las multinacionales y sus razones, ya que entiende que estas compañía tienen una posición mucho más racional que las empresas españolas, y que no están actuando de manera preventiva a la hora de mover sus sedes.
A partir del 1 de octubre, fecha del referéndum, se empezó a detectar un pánico empresarial que comenzó por los bancos —Sabadell y CaixaBank—, pero se extendió como un reguero de pólvora. Según el último dato del Colegio de Registradores, hasta la tarde de este jueves 917 empresas han movido su sede fuera de Cataluña, muchas de ellas trasladando también la sede fiscal. El ritmo está alcanzando más de un centenar al día.Oficialmente, la respuesta de Junqueras siempre ha sido minimizar el fenómeno. Primero lo relativizó diciendo que tampoco pasaba nada porque se iban a los países catalanes (https://www.elconfidencial.com/espana/cataluna/2017-10-06/independencia-cataluna-sabadell-junqueras-paises-catalanes_1456539/), días después puso el énfasis en que no marchaba el personal ni se cerraban plantas productivas. También destacó el bajo coste fiscal para la Generalitat, las cifras de inversión extranjera directa, y se acusó a Madrid de estar detrás de una campaña para que saliesen de Cataluña. Pero de puertas adentro, la situación se percibe como de extrema gravedad.
Responsabilidad políticaPor ahora, Junqueras ha podido esquivar las responsabilidades políticas. El Parlament está secuestrado por la mayoría soberanista y hace mes y medio que no hay control del Govern. Así que Junqueras ni siquiera ha tenido que comparecer en la comisión de Economía, donde PP y PSC han solicitado que acuda a dar explicaciones sobre la marcha de sedes sociales y fiscales de empresas. Como la comisión no se reúne, Junqueras no ha dado señales de vida. El PSC ha pedido en varias ocasiones su dimisión (https://www.elconfidencial.com/empresas/2017-10-07/oposicion-pide-dimision-junqueras-perdida-sedes_1457141/) por la fuga de empresas de Cataluña.
La oposición ha pedido la dimisión de Junqueras por su imprevisión en la fuga de sedes de empresas de Cataluña, pero él ha esquivado ir al Parlament
Desde la 'conselleria' se quiere poner el énfasis en las empresas industriales que no han abandonado la comunidad, caso de Seat, Lidl, Nissan, Endesa, Nestlé, Basf, Cargill, Schneider Electric, Novartis, Danone, H&M, Sanofi Aventis, Havas Media Group, Sca Hygiene Products, Unilever, Celsa Group, Lear y Boehringer Ingelheim, teniendo en cuenta los grupos con mayor facturación.
Peso de la industriaEn estos casos, se trata de industrias con activos pesados instalados en Cataluña y de multinacionales con mucha tradición en el mercado catalán. Sin embargo, no está previsto que las compañías antes citadas participen en la reunión.Desde la Generalitat están intentando minimizar el 'efecto sede', que a la larga implica perder la condición de centro de decisión, el desplazamiento de servicios corporativos y el traslado de directivos, además de otros efectos, como la pérdida de ingresos fiscales como el IAE. Ayuntamientos como Sant Cugat (Catalana Occidente) o Sabadell (Banco Sabadell) sufrirán un impacto negativo en las cuentas municipales del año que viene.
Uno de los factores más desestabilizadores para las empresas es la ley de transitoriedad (https://www.elconfidencial.com/espana/cataluna/2017-10-15/ley-transitoriedad-cambiar-constitucion-decreto_1460883/), que podría entrar en vigor una vez se declare la independencia, algo que ahora Junts pel Sí y la CUP quieren hacer la próxima semana. Este texto jurídico permite cambiar por decreto todo el marco legal. Y, precisamente, seguridad jurídica es lo que más quieren las empresas.